A un año y cinco meses (media administración) de haber llegado a la Presidencia Municipal de Lázaro Cárdenas, el maestro en ciencias, Orlando Emir Bellos Tun no ha podido con lo prometido en campaña, cuando buscó afanosamente el voto de los lazarocardenses, quienes vieron en él la esperanza de salir adelante.
Desde los primeros días los mismos que votaron por él, fueron desencantándose de su caudillo al que decían le apodaron en campaña “el hijo del pueblo”, además que el propio Emir Bellos prometió que seria un “presidente siempre presente”.
No cabe duda de que cae más rápido un hablador que un cojo, porque eso es lo que es el Maestro Emir, un político de saliva y papel; de saliva porque solo promesas ha llevado a la mayoría de las comunidades que ha visitado; de papel, porque los que todavía creen en él, le hacen una solicitud de sus necesidades por escrito, que siempre terminan en el sesto de la basura, o en el escritorio de una secretaria.
Los reveses ante solicitudes de familias necesitadas, sindicatos, gremios, centros ceremoniales y demás, no son pocas, argumentando que no hay dinero en las arcas del Ayuntamiento; al grado que los lazarocardenses se pregunta ¿cómo le hacia la pasada administración donde siempre encontraron respuestas a sus necesidades?
Pero el colmo para quien prometió estar siempre presente a favor del pueblo, sucedió el lunes 20 de febrero, cuando la Secretaria de Gobierno, María Cristina Torres Gómez, invito al “hijo del pueblo” para que asistiera a una reunión de reconciliación entre las navieras que dan servicio de transporte de Chiquilá a Holbox y viceversa, con los lancheros que ofertan los servicios turísticos en el Puerto de Chiquilá.
La cita era a las 10:00 de la mañana en la casa Ejidal de Chiquilá, pero con el fin de esperar que llegara Emir Bellos Tun, iniciaron casi a las 12:00 del día, y éste no llegó, a pesar de decir que es amigos de los ejidatarios y ellos donaron un terreno para construir lo que serán las oficinas de la Alcaldía. Despreciar una invitación de la operadora política de la Gobernadora y de los sectores prestadores del servicio turístico, pues no precisamente es estar “siempre presente”.
Las sendas publicaciones de medios de comunicación que le regalaban espacio a Emir Bellos en campaña decían que ‘En todo momento, el candidato Emir Bellos reafirmó su compromiso de estar siempre presente en cada comunidad de Lázaro Cárdenas, tener mayor acercamiento con los habitantes y conocer más a fondo sus inquietudes. Mencionó que en su administración no habrán autoridades ausentes y sillas vacías, serán autoridades presentes en todo momento y atentos a las peticiones de la ciudadanía, Emir Bellos dijo que en su equipo de trabajo tendrá gente preparada y con vocación de servir al pueblo, para que Lázaro Cárdenas ya no siga más en el abandono’.
Pero ya vienen de nuevo las elecciones para la Presidencia Municipal de Lázaro Cárdenas, y ahora sí le tocará al pueblo sacar del Palacio Municipal a Emir Bellos Tun y su camarilla, que solo llegaron para aprovecharse de la gente, ¡imagínese que subir un derecho de 500 pesos a 5 mil pesos!, eso es no tener progenitora.
A la mitad de su gobierno, resulta que los problemas del municipio son más grandes de los que dejaron administraciones pasadas; ahora si que se cumple la máxima de “estuviéramos mejor con Obrador”, el que entendió, entendió. Hasta la próxima.