Cancún, 1 de abril.- La violencia vicaria, un tipo de agresión en la que se ejerce presión sobre una persona a través de sus hijos u otros medios indirectos, ya está tipificada como delito en el Código Penal del Estado de Quintana Roo, destacó Angélica Amaro, presidenta del Colegio de Abogados de Cancún, quien enfatizó que, aunque esta forma de violencia siempre ha existido, anteriormente no contaba con un marco legal que permitiera su identificación y persecución.Subrayó que la tipificación de la violencia vicaria en el artículo 176 quinquies del Código Penal representa un avance significativo en materia de justicia, ya que ahora las víctimas tienen mecanismos legales para defenderse y presentar denuncias formales.“Antes, simplemente pasaba, pero no había manera de perseguirlo. Ahora, con este marco legal, estamos más cerca de la justicia”, afirmó en entrevista con RCA.La presidenta del Colegio de Abogados explicó que las denuncias pueden presentarse ante la Fiscalía Especializada en Violencia contra la Mujer o en la Fiscalía General del Estado. Además, hay un juzgado especializado donde se integran las carpetas de investigación con pruebas idóneas y completas.Entre las evidencias que pueden aportar las víctimas se incluyen testigos, videos, llamadas telefónicas y capturas de pantalla de conversaciones. Sin embargo, resaltó la importancia de que estas pruebas sean validadas mediante los protocolos legales correspondientes. Por ejemplo, las capturas de pantalla pueden ser válidas, pero deben estar certificadas por un perito en informática para garantizar su autenticidad y evitar manipulaciones.Para asegurar el valor probatorio de las evidencias digitales, las víctimas pueden solicitar que se gire un oficio a la compañía telefónica correspondiente para verificar la titularidad del número de teléfono implicado. Además, el contenido de las conversaciones puede ser analizado mediante una pericial de la Fiscalía, en la que el dispositivo móvil de la víctima se pone bajo resguardo para confirmar la autenticidad de los mensajes.Otro aspecto fundamental en el proceso es la presentación de testigos. Aclaró que es crucial que quienes testifiquen hayan presenciado los hechos, ya que los testimonios basados en relatos de la víctima (“testigos de oídas”) tienen menor peso en un juicio.“Si un testigo estuvo presente en los hechos, su declaración tendrá mayor valor probatorio que la de alguien que solo escuchó lo sucedido de la víctima”, explicó.También destacó que la ciudadanía debe conocer estos procedimientos para garantizar que sus denuncias sean sólidas y tengan validez legal.“Muchas veces, las víctimas creen que con presentar sus pruebas es suficiente, pero si no están debidamente validadas, pueden perder valor en el proceso”, indicó.Finalmente, hizo un llamado a quienes sufren violencia vicaria a informarse y acercarse a las autoridades correspondientes para recibir asesoría legal y protección.“Este es un paso importante en la lucha contra la violencia de género y en la garantía de justicia para las víctimas”, concluyó.
